Modalidades

¿Qué modalidades se juegan en un trinquet?

Dentro del trinquet, hoy en día, se practican dos modalidades: “escala i corda” y “raspall”. No obstante, hasta la primera mitad de este siglo, estuvo en las comarcas de la Plana y la Marina una modalidad que se llamaba “a rebot”. En la actualidad, cuando se habla de jugar a trinquet, hacemos referencia a la modalidad “per dalt corda”, porque a la mayor parte de los trinquets es esta la modalidad practicada. 

• “Escala i corda" 

La modalidad de trinquet por arriba de la cuerda parece que tiene sus orígenes a principios del siglo actual. Fue un gran jugador de aquel momento, Nel de Murla, quien por 1910 revolucionó todo el juego de pelota al eliminar las rallas y, por contra, poner una escalera lateral y una cuerda central que dividía el campo en dos partes. Las razones de este cambio hace falta buscarlas en la necesidad de hacer un deporte más vistoso, menos complicado y menos duro, (por eso la cuerda) y por otro lado, la creación de nuevos espacios que propiciaron la entrada de más gente al trinquet (por eso la escalera)

El juego de pelota por arriba de la cuerda consiste en jugar la pelota pasándola por arriba de la cuerda central, de un equipo al otro, con la condición que la pelota no pegue nunca dos saltos.

La partida de trinquet siempre empezará con la ferida de un jugador, el cual, cuando hiera, tiene que picar la pelota en la muralla situada detrás del público para que después caiga en el dau. Una vez la pelota en el dau, el jugador de la escalera contrario la jugará al aire o al salto, de la manera que más le convenga. Si por el contrario la pelota no entra en el dau será considerada falta, mientras que si el jugador de la escalera no la puede jugar será sacada por el feridor, es decir, quince para su equipo.

Si el que hace el dau vuelve la pelota de buenas, es decir, consigue pasarla al campo contrario por arriba de la cuerda, se iniciará el juego, y se lanzaran la pelota de unos a otros, hasta que uno de los dos equipos consiga hacer un quince.

Según estas sencillas reglas se desarrollará la partida entre dos equipos de un máximo de tres jugadores. El objetivo de todo jugador será conseguir un quince, si no directamente, prepararlo para el siguiente, porque, como dice un dicho del juego, el quince siempre se hace en dos veces. La consecución de este objetivo se puede hacer básicamente de dos maneras, jugando por dentro del trinquet, es decir, tirar la pelota buscando la cuerda y fuerte, lo que se conoce por cortar la cuerda o blanquear cuerda; o bien jugando por fuera del trinquet, intentando encalar las pelotas a la galería o a les llotgetes.

Otra manera de intentar hacer un quince será cerrando la pelota en la muralla, acercándola, de manera que el jugador contrario tenga muchas dificultades para devolverla y lo tenga que hacer siempre con la izquierda. A esta manera de ir la pelota por la pared se le conoce por “anar menjant calç”, a causa del material con el que está pintada la pared del trinquet, y que la pelota puede arrastrar en su trayectoria.

• “Raspall” 

La otra modalidad practicada es el raspall. Al raspall dentro del trinquet se juega de la misma manera que a la calle pero sin las rallas.

A la modalidad de raspall al trinquet, se tiene que tener presente, de cara al juego, la existencia de los rebotes. La pelota que vaya al rebote o a las galerías solo podrá ser jugada al aire o al primer salto, en caso de no haber hecho ninguno anteriormente. También se tiene que poner atención en los tamborins, ya que la pelota que los golpeé será considerada quince del que la ha lanzado.

• “A rebot” 

También en los trinquets se practicaba una modalidad llamada a rebot o también a curtes. En esta modalidad el dau se trasladaba al rincón contrario de la escalera y, además, existía una cuerda, no tan gruesa como la central, a unos cuatro metros de altura y que distaba cinco o seis metros del rebote.

La ferida también cambiaba de alguna manera en esta modalidad, porque ahora el feridor botaba la pelota sobre una banqueta, que, por contra a la llosa, estaba situada a la orilla de la muralla. Después de botar la pelota sobre esta banqueta, el feridor golpeaba la pelota suavemente para enviarla por arriba de la cuerda que hemos nombrado antes y, por descontado, dentro del dau.